Las palabras del evangelio de Lucas sobre la Virgen María nos demuestran que la admiración por ella estaba presente ya en las primeras comunidades. Con el paso de los siglos, el Espíritu Santo hizo que la Iglesia comprendiese aun mejor la importancia y la misión de María en los eventos de Jesús histórico y también en el cuidado del pueblo de Dios en todas las generaciones. La asunción de la Virgen María empezó cuando ella dijo sí a Dios: toda su vida estuvo en subida hacia Dios. La ascesis cristiana es justamente subir cada día más para que un día estemos completamente en el cielo, como la Virgen. Paz y bien.