Jesús pasó toda una noche en oración y pudo caminar sobre las aguas, esto es, vencer las dificultades. Pedro también quiso hacer lo mismo, pero no porque se había preparado con la oración sino para probar el poder de Jesús. De hecho, caminó un poco pero, después, el miedo lo hizo dudar y empezó a hundirse. Jesús quiere que todos caminemos sobre las aguas, esto es, venzamos las pruebas, pero debemos prepararnos con una intensa oración que nos ayudará a no dudar del poder de Dios. Recordemos que nuestra fe debe ser alimentada con la oración. Paz y bien.